Fellow 2017
Constanza Arriagada
Región del Bío Bío
El mundo ha cambiado y las competencias que requerimos para enfrentarlo están cambiando constantemente. Actualmente habilidades como la creatividad, la resolución de problemas complejos, el trabajo en equipo y el pensamiento computacional, son centrales.
Pero, ¿qué pasaría si lográsemos desarrollar el pensamiento computacional desde la primera infancia? Esta fue la pregunta que se hizo Constanza Arriagada (28 años) junto a su equipo, con quienes crearon a Mimo: el pequeño robot que te enseña a programar; herramienta que permite, a través de la exploración y un juego libre de estereotipos y roles de género, adquirir los conceptos básicos de programación y contribuir así a disminuir la brecha de género en las STEM (Science, Technology, Engineering and Mathematics), para que más niños y especialmente niñas se involucren con la tecnología sin coartar sus potencialidades, de forma creativa y libre de pantallas.
Mediante un robot controlado con un tablero y fichas de instrucción, niños y niñas crean sus primeros códigos algorítmicos para resolver problemas complejos, transformándose así en un recurso pedagógico que potencia estas competencias, asociándolas a los objetivos de aprendizaje dictados por el MINEDUC y facilitando el acceso a la tecnología para que otros sean los próximos creadores y no sólo los consumidores de ésta.